Los Reyes Magos de República Dominicana muy infantil

El evangelio de san mateo (MT2,1-12) cuenta de unos Magos que vinieron de oriente buscando al nuevo rey que habría de nacer. En las Escrituras no se abunda mucho sobre su origen, su personalidad, sus rasgos, ni siquiera sus nombres.

Se asume que eran “sabios” o astrónomos, llamados en aquella época como “magos”, porque venían siguiendo una estrella que presagiaba la llegada del nuevo rey.

Como venían con regalos para el rey que habría de nacer, la tradición los describe como reyes bondadosos con presentes para todos, asignándole un nombre y rasgos específicos a cada uno.

Melchor: Un anciano blanco con barbas blancas. Su regalo para Jesús es oro, representando su naturaleza real.

Gaspar: Joven moreno. Su regalo es el incienso, que representa la naturaleza divina de Jesús.

Baltasar: De raza negra. Su regalo a Jesús es mirra, que representa su sufrimiento y muerte futura.

NUESTRA IDENTIDAD

Desde nuestra infancia nos acostumbraron  que  los reyes magos,  vienen cargados de juegos en  tres camellos que siempre llegan cansado y sudoroso a los que hay que guardarles agua y hierbas debido a su largo viaje.

En nuestra mente todavía existe la creencia de cuando éramos niños que al levantarnos  el día  6 de enero de cada  año “la sorpresa” los juguetes que siempre han hecho feliz a todos los  niños, o por lo menos aquellos que se han portado bien  durante el año entero.

Ya sabemos que los reyes magos son nuestros padres, quienes compran y en el mejor de los casos preguntan a los menores que quieren les dejen para la fecha de forma tal que facilite la búsqueda en las tiendas las que se convierten en un solo tapón y una sola fila interminable.

Un día sin clases, sin tareas y libre para disfrutar de aquellos regalos los cuales eran inofensivos y menos dañinos a los de hoy en día  de  altas modernidad  y avance tecnológicos, muy costosos por cierto.